Una trabajadora denuncia que fue despedida el mismo día que anunció su embarazo
Joana Restrepo tenía un contrato en vigor de seis meses: "Me dijeron que no se lo podían permitir por la crisis".
ITZIAR FERNÁNDEZ / PUERTO DEL ROSARIO.
Joana Maricel Restrepo, de 30 años de edad, ha denunciado que fue despedida el mismo día que comunicó a la empresa que estaba embarazada. Trabajaba como empleada en el comercio Stadio Sport de El Castillo con un contrato de seis meses, los dos primeros de prueba.
"Sólo estuve algo más de un mes porque cuando firmé el contrato estaba embarazada, pero no lo sabía", apuntó Joana Maricel.
Seguidamente, explicó que el pasado 23 de abril "la encargada comenzó a interrogarme al comprobar que acudí varias veces al baño con algunas náuseas". Me observaron -agregó la joven- y "me preguntaron si era anoréxica o si tenía problemas, y por ello les comuniqué que estaba embarazada de ocho semanas".
La denunciante destacó que de forma repentina se montó un gran revuelo en el establecimiento con varias llamadas y "comenzaron a increparme y decirme que no podían permitirse una embarazada con la crisis económica actual, y sufrí una escena horrible", recordó. Por la tarde la empresa comunicó a la empleada que estaba despedida, "pero que podía terminar mi periodo de prueba".
Sin embargo, la denunciante recibió otra llamada de la empresa al día siguiente para informarle de que ya estaba dada de baja en la Seguridad Social, y que su labor había concluido. "Reiteradamente les pedí que me dejaran acabar mi contrato de seis meses, que no tenía problemas de salud y que quería trabajar, pero no me escucharon", advirtió.
Una situación que Restrepo califica de vergonzosa en los tiempos actuales, cuando se habla de poder compaginar la vida laboral con la familiar. "Sufrí una crisis nerviosa y un gran malestar porque me gustaba el trabajo, estaba aprendiendo y siempre me he dedicado al comercio y hostelería", desveló.
Esta mujer considera que ha sufrido una injusticia y "he decidido denunciarlo en los juzgados para que este tipo de atropellos a los derechos de las trabajadoras no se repitan". Al tiempo que animó a otras personas que vivan esta misma situación a denunciar.
Fuente: laprovincia.es
"Sólo estuve algo más de un mes porque cuando firmé el contrato estaba embarazada, pero no lo sabía", apuntó Joana Maricel.
Seguidamente, explicó que el pasado 23 de abril "la encargada comenzó a interrogarme al comprobar que acudí varias veces al baño con algunas náuseas". Me observaron -agregó la joven- y "me preguntaron si era anoréxica o si tenía problemas, y por ello les comuniqué que estaba embarazada de ocho semanas".
La denunciante destacó que de forma repentina se montó un gran revuelo en el establecimiento con varias llamadas y "comenzaron a increparme y decirme que no podían permitirse una embarazada con la crisis económica actual, y sufrí una escena horrible", recordó. Por la tarde la empresa comunicó a la empleada que estaba despedida, "pero que podía terminar mi periodo de prueba".
Sin embargo, la denunciante recibió otra llamada de la empresa al día siguiente para informarle de que ya estaba dada de baja en la Seguridad Social, y que su labor había concluido. "Reiteradamente les pedí que me dejaran acabar mi contrato de seis meses, que no tenía problemas de salud y que quería trabajar, pero no me escucharon", advirtió.
Una situación que Restrepo califica de vergonzosa en los tiempos actuales, cuando se habla de poder compaginar la vida laboral con la familiar. "Sufrí una crisis nerviosa y un gran malestar porque me gustaba el trabajo, estaba aprendiendo y siempre me he dedicado al comercio y hostelería", desveló.
Esta mujer considera que ha sufrido una injusticia y "he decidido denunciarlo en los juzgados para que este tipo de atropellos a los derechos de las trabajadoras no se repitan". Al tiempo que animó a otras personas que vivan esta misma situación a denunciar.
Fuente: laprovincia.es
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